miércoles, 6 de febrero de 2008

!Miercoles....! de ceniza

Hoy miércoles 6 de febrero se dio inicio a la cuaresma en el mundo católico, con el tradicional rito de la ceniza en la frente. Siendo que no tuve un adiestramiento estricto sobre las costumbres religiosas de mi país (el del sagrado corazón, el divino niño y el milagroso de buga), pues mi capacidad de comprensión frente a estos rituales que parecen en cierta manera, algo escandalosos; no ha logrado ser lo bastante abierta para realizar las lécturas correspondientes, a todo el aparato semiológico que de ella se desprende. Algún cura fanático me debería decir que me azote tres veces por la mañana, a ver si apunta de penitencia aprendo lo que no me enseñaron; pero como que eso de pegarse en la espaldita con un látigo, debe doler un poquito. Por lo tanto, prefiero entonces, realizar mi propia léctura sobre el acto del día de hoy, y pues si me equivoco, entenderán que es pura ignorancia y en ningún momento, se trata de juicios dirigidos hacia las tradiciones religiosas de esta "MI TIERRA"

En primer lugar me debo remitir al movimiento de masas registrado en las ilustres iglesias. La Perseverancia, Las Aguas y Las Nieves que son los templos que tengo más a la mano, no les cabía un tinto esta mañana, una cantidad de gente en bandada se achicharraba los unos con los otros para poder entrar. Como no tengo muy presente estas fechas en mi agenda, llegué a pensar que estaban regalando dolares adentro, pero después de observar por breves instantes lo que allí sucedía, me percaté en el acto que no se trataba de billetitos verdes, sino de la misa correspondiente al inicio de los cuarenta días sin carne; que bien combinan con la temporada Taurina en Bogotá, es decir, no se puede comer carne pero si se puede acribillar toros.

Seguido a esto y no sé en que parte de la misa, el respectivo parroco se ubicaba frente a la fila de feligreses que expectantes esperaban a que les pintaran la frente con algo que le dicen ceniza, pero de lo cual no estoy muy seguro que lo sea. En primer lugar: De donde sacan la Ceniza?, las cenizas que yo conozco son las que dejo como producto del cigarrillo acabado, pero estas son grises y se deshacen en el acto; en cambio a las que me refiero, tienen un color más oscuro; pero qué digo oscuro, esa vaina es completamente negra, y así mismo es espesa, mejor dicho, es como arequipe pero negro. Tal vez sea eso, tal vez mezclen la ceniza con arequipe, y pues, producto de esta aleación resultaría entonces dicho compuesto acenizado al cual nos intentamos referir.

Inicia entonces el proceso de poner la frente para que le estampillen la cruz de ceniza, uno a uno van pasando los feligreses a colocar su frontal como si fueran una pared para grafitiar. Recuerdo que cuando niño me decían que uno no debía pintarse la cara con cosas raras, pues bien, ese recuerdo llegó a mí en el momento en el cual iniciaba la circulación de frentes, provocándome una ligera conmoción entre lo que me enseñaron cuando niño y lo que me encontraba presenciando.

De esta manera, fueron saliendo los feligreses de la iglesia, con la frente estampillada de arequipe con ceniza y con una sonrisa plasmada en los labios, mas aún en las mujeres, lo que me condujo a preguntarme por aquello de esa sonrisa en el rostro, y pues no llegué a otra conclusión que aquel menjurge que les ponen en la frente debe tener algún tipo de propiedad esfoliadora, o contra las arrugas, o debe ser buenisimo para el blanquemiento de la piel. Supongo que debe ser eso, no encuentro otra explicación para que salgan tan felices de una iglesia con una cosa en la frente que en realidad no se sabe que es. Y así, la ciudad continuó su movimiento con las frentes de los transeuntes marcadas. Creo que en síntesis esto de la cuaresma es algo hasta traumático, una pesadilla de esas que uno le da cuando se sufre de parálisis del sueño o cualquier vaina de esas, y para la muestra, que puede pensar uno al ver pasar una mujer que lleva la ceniza en la frente?, nada más que una pila doble A o Triple A, con el polo positivo marcado arriba y el negativo pues...


Miguel Ángel Pulido

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